Modo de preparar:
Primero se monta la nata. Muy importante que esté bien fría. No se tiene que batir mucho para no cortarla, cuando ya se nota una textura firme y no se despliega de las varillas está ya lista. Se guardan unas 4-5 cucharas para el adorno final.
Se le añade poco a poco el queso mascarpone y el otro queso crema, mezclando con movimientos envolventes desde arriba para abajo, así no se pierde el aire conseguido en la nata.
Una vez que tenemos la crema lista la ponemos en el frigorífico un rato hasta que tengamos la bandeja lista para montar el pastel.
En una bandeja (la mía mide 35x25x4) se pone papel vegetal y luego se saca la crema y se echa 5-6 cucharas en una manga pastelera. Luego se echa alrededor de las paredes interiores de la bandeja una cinta de nata, para que después pongamos una fila de bizcochitos rotos por la mitad y colocados de pie en la nata. El café ya tiene que estar echo y frío. A continuación, se sumergen los bizcochitos en el café se escurren un poco y se colocan en fila en el fondo de la bandeja. Una vez puesta la primera capa de bizcochitos se le echa una capa de crema por encima. Se reparte bien por toda la superficie y luego se espolvorea un poco de cacao en polvo. Se sigue sumergiendo los bizcochitos en el café y se coloca la segunda fila. Seguidamente se echa la crema y se extiende igual. Se espolvorea bien de cacao y si os gusta también unos fideos de chocolate. Se saca la nata que teníamos reservada y se pone en una manga pastelera. Se adorna el tiramisú a vuestro gusto. Se guarda en el frigorífico para 3-4 horas o bien para toda la noche.
Espero que os guste la receta y que la preparéis vosotros también. Espero vuestros comentarios y preguntas.
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¡Hasta la próxima receta!