La pechuga de pollo es una carne muy sana debido que no contiene grasa y al cambio aporta proteínas de buena calidad, vitaminas y minerales. Pero es una carne muy seca y sin sabor, entonces le tenemos que dar un poco de alegría. Con una salsa buenísima la pechuga resulta jugosa y deliciosa. Además se prepara muy fácil y en poco tiempo.
Ingredientes:
3 filetes de pollo
2 cdas maicena
30 g mantequilla
2 cdas miel
2 cdas de perejil –
2 cdas salsa inglesa o salsa perrins
3 dientes de ajos
Aceite de oliva
Sal
Pimienta molida
opcional 30 ml vino blanco o rosado
Modo de preparar:
La pechuga de pollo la tenemos fileteada. Salpimentamos por ambas partes cada filete y luego los apartamos. Picamos el perejil. Cortamos en trozos muy pequeños los dientes de ajo.
A los filetes de pechuga le espolvoreamos bien de maicena por encima. Esta va a ayudar que la pechuga coja todos los sabores durante el cocinado.
Ponemos una sartén al fuego y añadimos una cucharada de aceite de oliva. Dejamos que se caliente bien. Después añadimos los filetes de pechuga y los vamos a cocinar 2 minutos por cada lado.
Cuando la pechuga se ha cocinado por amabas partes 2 minutos añadimos en la sartén la mantequilla y la dejamos que se derrite. Esta le va a dar un sabor muy bueno a la pechuga.
Cuando se haya derretido la mantequilla podemos añadir el ajo picado y lo repartimos entre los filetes de pechuga. Ponemos también la salsa inglesa (Perrins). Si no la tenéis podéis sustituirla con salsa de soja. Pero se tiene que tener en cuenta que la salsa de soja es más salada. Lo digo por no añadir mucha sal a la salsa. Después añadimos la miel y removemos bien para mezclar todos los ingredientes de la salsa.
Dejamos la pechuga de pollo que se cocine unos 3 minutos a fuego moderado por cada lado. Después de 3 minutos le podemos dar la vuelta a los filetes.
Mientras podemos añadirle de modo opcional unos 30 ml de vino blanco o rosado porque le va a dar un toque muy rico a la pechuga. Durante la cocción el alcohol del vino va a desaparecer y el vino va reduciendo. Durante la cocción le echamos salsa por encima a los filetes.
Cuando la pechuga de pollo está hecha apagamos el fuego y la sacamos en un plato junto con la salsa. Ahora le ponemos el perejil fresco picado por encima. Y listo para servir.
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